El buen tiempo y la suma de más horas de luz al día anuncian que la primavera está cerca, y eso siempre propicia un cambio en la puesta en escena de nuestros ambientes cotidianos. Uno de los elementos decorativos por excelencia para potenciar la llegada de un cambio de estación son las flores.
Nada tan hermoso como las flores naturales, pero no siempre la orientación de nuestra casa, la luz y las posibilidades de conservación nos permiten incluirlas en la decoración de nuestro hogar, por eso las flores artificiales han formado parte de nuestras propuestas en alguna otra ocasión.
Las flores naturales tienen su propio encanto, como el olor o la frescura, pero también una fecha de caducidad; por el contrario, las flores artificiales no necesitan mantenimiento, evitándonos también la presencia de insectos y si tienen una cierta calidad, muestran un gran realismo natural.
Cualquier estancia de la casa es válida para acoger este tipo de flores, sin importar la existencia o no de luz. Su naturaleza artificial las convierte en una perfecta alternativa y, a la vez, en un adorno decorativo permanente.
Para esta temporada encontramos que algunas firmas especializadas en este tipo de creaciones, apuestan por las flores de campo, entre las que destaca la lavanda con una extensa variedad de modelos, también se presenta la gergebra en colores como el blanco, el rojo, el amarillo o el naranja como flor de Primavera y Pascua.
Para poder crear composiciones reales, solo tienes que añadirle ramas verdes sin flores como varas de eucaliptus, hidra, sorbus o skimmia entre otras.
En el arte floral no existen reglas estrictas sino el deseo de reflegar en el ambiente ese toque especial que nos caracteriza a cada uno, así que todo dependerá del gusto de quien decore y del estilo del espacio donde se vayan a colocar las flores.
Fotografías: Muy Mucho
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Publicado el: 04-03-2016