Limpiar y retirar las alfombras que nos aportaron calidez en el invierno es una tarea ineludible cuando llegan los primeros calores. Aquí tienes la guía definitiva para limpiarlas y almacenarlas adecuadamente. Objetivo: encontrarlas impecables cuando llegue el otoño.
La llegada del buen tiempo nos invita a realizar pequeños cambios y tareas de mantenimiento en la casa: una de ella es la retirada de alfombras. Hay que limpiar y enrollar las alfombras para almacenarlas adecuadamente. Hacerlo bien garantiza que las alfombras nos duren muchos años en perfectas condiciones.
Limpieza y mantenimiento de alfombras
Las alfombras aportan un plus de confort a los espacios, pero si no se limpian bien pueden ser una fuente de suciedad y agravar mucho las alergias. Por eso deben aspirarse al menos una vez por semana, aunque lo ideal es hacerlo entre dos y tres veces en las zonas más transitadas de la casa. Lo ideal es prescindir del calzado de calle para andar sobre ellas.
Para mantener los colores vivos inalterables, puedes derramar de vez en cuando sal sobre la alfombra, dejar actuar un rato y luego aspirar de la forma habitual. Y para eliminar los malos olores, incluido el del tabaco o el de las mascotas, se puede espolvorear bicarbonato sobre toda la alfombra y pasar a continuación la aspiradora.
Las manchas más habituales se quitan frotando con un cepillo embebido en agua con vinagre o bien en agua con un chorrito de amoniaco. También se puede echar sifón o soda y proceder a frotar con un trapo o cepillo. Por supuesto, mejor hacerlo nada más producirse el derramamiento de líquido sobre ella o en el momento en que se ha producido el accidente.
Las manchas de cera que hayan podido caer de una vela se eliminan a la manera tradicional: con la plancha. Se pone la zona manchada de la alfombra del revés sobre la tabla de planchar cubierta con un papel de estraza. Y se plancha bien caliente para que la cera se deposite sobre el papel de estraza. ¡Un truco de madre que parece magia…!
Otro problema habitual: si la alfombra se ha hundido en la zona donde se asientan los muebles, sofás y sillones, unos trozos de hielo le harán recuperar su forma habitual.
Y las esquinas que se hayan doblado hacia arriba se solucionan aplicando por el revés cola de carpintero. Cuando se seca, la alfombra está de nuevo "tiesa", y ya no hay riesgo de tropezones…
Cómo guardar las alfombras
Se puede recurrir a una limpieza profesional cuando se trata de una buena alfombra. A menudo llevarla a la tintorería es también una buena forma de almacenarla durante todo el verano allí.
Si no tienes presupuesto (al menos 50 €), lo mejor es realizar la tarea de limpieza y desodorización en casa como se ha indicado más arriba.
Después sólo hay que enrollarla con una bolas de naftalina y unas hojas de laurel para mantenerla a salvo de la polilla, pero nunca doblarla.
Finalmente hay que sellar con una cuerda o bien cinta adhesiva de embalar. Si es posible, lo mejor es guardarla horizontalmente.
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Categorías: Limpieza, Alfombras
Publicado el: 06-05-2013 | Autor: María Tebar