Las habitaciones de los niños destacan siempre por su colorido. Pero dentro de esa impresionante explosión cromática, existen diferencias entre niños y niñas, unas diferencias extremas que sin embargo se irán acercando a medida que vayan creciendo.
Las habitaciones de las niñas suelen estar decoradas en tonos rosas, malvas y fucsias mientras que las de los niños presentan la gama completa de los azules. El súmun del cromatismo llega cuando niños y niñas tienen que compartir un mismo dormitorio.
En el caso que nos ocupa, las diferencias también se ven reflejadas en el estampado que presentan los textiles. Estampados florales y formas geométricas para las niñas, y dibujos relacionados con los coches y el motor para los niños.
Por otra parte, sería imposible no hacer una mención al diseño de este mobiliario, que convierte la cama de los pequeños en una improvisada tienda de campaña. Algo que seguro encantará a los pequeños y hará que se sientan muy orgullosos de la decoración de su habitación.
En el caso de las estanterías, no solamente el color azul o rosa, muestra las diferencias entre ambos, también las formas redondeadas en el primer caso, y puntiagudas representan las formas preferidas por los niños.
Con el paso del tiempo tanto los colores, como las formas y los estampados se unificarán para dar como resultado un estilo de decoración que les ayudará a introducirse en la vida de los adultos.
Fotografías: Imaginarium