Sistemas para “salvar” escaleras en casa

Tener en la familia personas mayores o discapacitadas o con secuelas a medio o largo plazo de enfermedades o accidentes pueden arruinar el sueño de tener una casa en varias plantas. Las casas con escaleras se convierten en una barrera infranqueable en determinados momentos de la vida de las personas. Lo que antes era una bonita vivienda en dos o tres plantas puede terminar convirtiéndose en una auténtica “pesadilla” para subir y bajar, que limita enormemente la movilidad y la calidad de vida de los que habitan en ella.

Afortunadamente, son cada vez más las soluciones que permiten seguir disfrutando de una vida activa en unifamiliares, dúplex, etc.. Son ya muchas las soluciones que han desarrollado empresas especializadas en la materia para mejorar la accesibilidad a las casas con barreras arquitectónicas debidas a la altura.

Las sillas salvaescaleras, las plataformas para personas que necesitan ir en silla de ruedas, los elevadores sencillos (además de los ascensores), las orugas “subescaleras”… Todas estas novedades, hasta hace unos años impensables, han conseguido terminar con todo este tipo de problemas, a menudo de forma más económica de lo que pueda parecer en un principio.

El desarrollo y la gran demanda de todo este tipo de sistemas por un número cada vez mayor de familias, la obligatoriedad de instalarlas en tiendas y espacios públicos de difícil acceso, así como las subvenciones y ayudas para su instalación, han conseguido que los precios sean más bajos y abordables por un número cada vez mayor de personas.

Sillas salvaescaleras

Son ya casi un clásico en accesibilidad en espacios interiores con escaleras, que deben disponer de al menos 80 cm de ancho. Disponen de un sistema de tracción mediante cremallera y piñón o bien mediante rodillos, según modelo, y generalmente se pueden montar a ambos lados de la escalera. Las hay para tramos de escalera rectos o con varios codos, incluso para escaleras de caracol. Normalmente disponen de un sistema de desembarque, que hace girar la silla en el punto de parada para facilitar el desembarque. También hay sillas especiales con parada en caso de que haya rellanos.

Apenas tienen consumo eléctrico, y en caso de que falle el suministro en la red pueden funcionar con baterías. Disponen de cinturón de seguridad y de una llave de seguridad en el reposabrazos para que no la usen los niños. Es posible plegar el asiento cuando no está en uso para que no dificulten el paso del resto de la familia por la escalera. La instalación se lleva a cabo de forma rápida y sin necesidad de obras.

Plataformas salvaescaleras

Son especiales para instalar en escaleras con un mínimo de 1,20 m de ancho. Hay diferentes modelos para escaleras rectas o curvas, y también para interiores o espacios exteriores. Disponen de un sistema de tracción mediante cremallera y piñón, y normalmente funcionan a base de baterías auto-recargables. Opcionalmente disponen de asiento abatible. La plataforma dispone de plegado automático para cuando no se utiliza. Se instalan de forma rápida y sin obras.

Elevadores verticales para poca altura

Son la solución ideal para salvar desniveles de no mucha altura (hasta 2 metros aprox.) en espacios interiores o exteriores, por ejemplo, en unifamiliares, portales, etc. No necesitan foso, como los ascensores, y disponen de puertas y cancelas automáticas. Funcionan mediante dos guías con rodillo integrado. Puedes consultar nuestro reportaje sobre ascensores.

Elevadores hidráulicos para piscinas

También existen otro tipo de sistemas que aseguran la accesibilidad a piscinas, como los elevadores hidráulicos. Todos los hemos visto ya en establecimientos hoteleros y piscinas públicads, y cada vez se utilizan más en el ámbito privado. Incluso es posible elegir entre los de anclaje fijo y móvil, lo que ofrece una versatilidad enorme al sistema.

Precios y servicio postventa

Es difícil dar precios de estos sistemas, ya que el tipo escalera, espacio, los metros de altura modifican mucho el presupuesto. A la ahora de elegir el sistema adecuado a cada tipo de barrera, es conveniente pedir varios presupuestos y dejarse asesorar por los profesionales que nos parezcan más serios. No te queden con dudas sobre ningún aspecto de instalación y pregunta cuánto tiempo durará la instalación, en qué consistirá y, muy importante, qué tipo de garantía y servicio postventa ofrecen a los clientes.

Fotografías: Válida