Como lugar de trabajo que es, la cocina constantemente requiere de limpieza y ventilación. Todo aquél que haya cocinado alguna vez sabe que no es suficiente abrir las ventanas para evacuar los humos y gases que se generan al cocinar. Aunque hoy día la gran mayoría de las placas de cocinas son de tipo vitrocerámico, con lo que la combustión del gas propia de las cocinas que funcionan con este combustible está desapareciendo (excepto en algunos hogares en los cuales se prefiere cocinar con gas), la preparación de los alimentos tanto en la placa como en el horno genera humos, grasa y olores que es necesario evacuar. Para ello es indispensable contar con una buena campana para la extracción de dichos humos y olores.
Santos
Escoger una campana extractora adecuada no es tan sencillo como parece. Tenemos que tener en cuenta parámetros como el tamaño de nuestra cocina, el uso que le damos, el presupuesto con el que contemos, la ventilación natural (ventanas practicables) existentes en la cocina, si es una cocina abierta a otra estancia o una habitación independiente, el espacio con el que contemos para la propia mampara, la ubicación de la placa (¿está sobre los muebles de cocina, pegada a la pared, o en una isla independiente) y la estética y el diseño.
TIPOS DE CAMPANAS SEGÚN SU FUNCIONAMIENTO
Dependiendo de cómo trabajen las campanas, podemos clasificarlas en dos tipos básicos:
Fagor
TIPOS DE CAMPANAS SEGÚN SU ESTÉTICA
Aparte de los sistemas de funcionamiento, las campanas pueden clasificarse también por su forma y por sus acabados.
Fagor
A LA HORA DE ESCOGER: EN QUÉ HAY QUE FIJARSE
Lo primero que hay que considerar a la hora de escoger una campana extractora es la necesidad de evacuación de humos de la cocina. Esto dependerá en gran medida del tamaño (las cocinas pequeñas necesitan más aspiración), la ventilación, si la cocina es independiente o de tipo americano (éstas necesitan más potencia para evitar llenar de humos y olores al resto del espacio) y de si la cocina se utiliza mucho o poco.
La potencia de aspiración de una campana extractora se mide en m3/h (metros cúbicos por hora). Una potencia de aspiración más que aceptable es de 600 m3/h, pero en el mercado podemos encontrar modelos de entre 300 y 900 m3/h, dependiendo de las necesidades del usuario.
La campana extractora debe colocarse obligatoriamente sobre la placa de cocina. Si instalamos una campana de succión, el tubo que comunique al electrodoméstico con el exterior deberá ser lo más recto posible, evitando la presencia de muchos codos y giros.
Otro aspecto a considerar es el nivel de ruido de la campana. Si vamos a utilizarla frecuentemente, agradeceremos que sea lo más silenciosa posible, aunque tengamos que pagar un poco más.
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MANTENIMIENTO DE LAS CAMPANAS EXTRACTORAS
Todas las campanas llevan filtros para el aire, tanto las de succión como las de recirculación. Los filtros se deben limpiar de forma periódica, cuando la grasa se haya acumulado en exceso. Su desmontaje y montaje suele ser bastante sencillo; además, los filtros también se pueden cambiar. Los filtros de carbono de las campanas de recirculación se deben cambiar obligatoriamente una vez al año para un correcto funcionamiento del sistema de depuración.
Los filtros de fibra de fieltro pueden lavarse a mano con cuidado, procurando que no pierdan la forma, en cuyo caso sería muy complicado volverlos a colocar. En cuanto a los de metal (muy habituales en campanas de succión), es posible lavarlos en el lavavajillas si no están demasiado sucios de grasa, en un programa corto. Cuando tienen mucha grasa es recomendable colocarlos en una bandeja o cubo con un desengrasante industrial o con amoniaco rebajado con agua, hasta que la grasa se ablande y la podamos eliminar.
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PRECIOS
Los precios de las campanas extractoras pueden variar considerablemente según su tamaño, estética y diseño, configuración y la marca fabricante. Los precios que indicamos son orientativos, con IVA incluido y de firmas conocidas.
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Publicado el: 16-02-2011 | Autor: Marta Sánchez